Secretaría de Innovación, Desarrollo Profesional y Tecnologías en Educación

Hace ya más de un siglo que, en nuestro país, el 21 de septiembre pasó a ser el Día del Estudiante. La fecha se eligió en homenaje al gran impulsor de la educación nacional: Domingo Faustino Sarmiento. Es que el 21 de septiembre de 1888 llegaron a Buenos Aires, procedentes de Asunción, sus restos.
Su origen se debe a la propuesta del por entonces estudiante y luego destacado arqueólogo Salvador Debenedetti en 1902, cuando era presidente del centro de estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Dicha propuesta fue aceptada por esa facultad, y luego se extendió a todo el país.
Este día, en coincidencia con el inicio de la estación de la primavera, se celebra a cada una/o de nuestras/os estudiantes con la firme convicción –parafraseando a Paulo Freire- que desde la educación pretendemos cambiar a quienes cambiarán el futuro.
Festejar el Día del Estudiante en y desde la escuela de forma cuidada y saludable es tarea de todas/os.